Quintana Roo, 6 de agosto del 2022.- Después de tanta podredumbre en el Poder Judicial de Quintana Roo, se espera que venga una limpia y de manera urgente, por parte del nuevo magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, Heyden José Cebada Rivas, quien fue nombrado para el periodo 2022-2027.
Heyden Cebada, por unanimidad es el titular del TSJ en el Estado, en sustitución de Gustavo Adolfo del Rosal Ricalde, quien tiene en el cargo ocho meses, desde que suplió a Antonio León Ruiz. Sin embargo, tomará este cargo a partir del 1 de septiembre del presente año.
Meses atrás, Cebada Rivas fue cuestionado por cometer presuntamente algunas violaciones al artículo 101 de la Constitución Política del Estado de Quintana Roo; esto por abogados y representantes de organizaciones; sin embargo, finalmente lo designaron como magistrado presidente del TSJ por unanimidad, ya que levantaron la mano a favor los magistrados Mario Alberto Aguilar Laguardia, Juan García Escamilla, Adriana Cárdenas Aguilar, Mariana Dávila Goerner, Gustavo Adolfo del Rosal Ricalde, Carlos Lima Carbajal, Luis Gabino Medina Burgos, Dulce María Balam Tuz, Verónica Gloria Acasio Trujillo, Ana Mercedes Castillo Carvajal y Felipe de Jesús Solís Magaña.
En esta nueva designación se espera que sea para bien de Quintana Roo, pues en los Juzgado del Estado impera la corrupción de la peor manera que pueda existir y lo peor, que la mayoría de los jueces solo calientan silla porque no ejercen su trabajo como tal y le dejan su labor al personal.
En los Centros de Reinserción Social al menos de Quintana Roo, existe un sin número de personas inocentes pagando un delito que no cometieron, pues la o él juez nunca hizo un trabajo profesional de buscar la verdad, sino quién la pague, ya que los expedientes no eran completamente analizados.
Quintana Roo necesita gente profesional, honesta y leal en los cargos de Procuración de Justicia; ojalá que el nuevo magistrado presidente Heyden Cebada Ruiz haga una limpia completa y remuevan a esos jueces corruptos e incompetentes, pues cuando estuvo Antonio León Ruiz, la podredumbre era cada vez más descarada, pues este funcionario se la pasaba casi de la mano para todos los eventos con Carlos Joaquín González.
