Luego de transcurrir años sin que las Fuerzas Armadas en Quintana Roo dieron un golpe fuerte en contra del narcotráfico, este miércoles “se sacaron la lotería” al decomisar casi una tonelada de cocaína en polvo enterrada en paquetes, en la zona montañosa del municipio de Othón P. Blanco. En el lugar se encontraron tres armas largas y dos vehículos. Dentro del comunicado que subió a su página la Secretaría de la Defensa Nacional este miércoles, señaló del importante decomiso de 40 paquetes que se encontraban enterrados en un área cercana a la comunidad “Tomás Garrido Canabal”, perteneciente al municipio de Othón P. Blanco. Los militares desenterraron la droga y en la inspección que realizaron en la zona, hallaron tres armas largas abastecidas con sus cartuchos, una camioneta cuatro por cuatro, y otra marca Ford pick-up. El resultado de este importante decomiso se realizó derivado del trabajo de inteligencia sobre el trasiego de droga vía aérea de las rutas entre los estados de Quintana Roo, Yucatán y Campeche, el cual arrojó un operativo dentro de la comunidad "Tomás Garrido Canabal", y de esta forma lograron detectar los paquetes de cocaína que en total llegó a los 960 kilogramos, además, dentro del mercado negro tiene un costo casi de 240 millones de pesos.
