Ante la falta de supervisión del presidente del Tribunal Superior de Justicia en Quintana Roo, en algunos Juzgados Penales y Orales se presenta una serie de irregularidades, en lo particular con los jueces, por falta de capacitación y principalmente que “siguen una línea derivada de la corrupción”. Es el caso de la juez en sistema Oral, Gabriela Concepción Carrillo Cab, quien carece de preparación y capacitación para determinar un caso en el nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio, es decir, emite una sentencia “a la ahí se va y quien me dice algo”. El ocho de agosto del año 2016, el extranjero de nombre Alexey y de origen ruso, presentó una denuncia ante el Ministerio Público en contra del doctor Manuel Salvador Gómez, responsable y propietario de la clínica “Bonfil”, ubicada en la delegación Alfredo V. Bonfil, en este municipio de Benito Juárez. En dicha clínica, falleció la esposa del denunciante por falta de atención médica, cuando iba a nacer su bebé, quien lamentablemente falleció también meses después. El caso pasó a juicio oral y la persona que iba a determinar si hubo o no delito, la juez Gabriela Concepción Carrillo Cab; sin embargo, en los juicios orales, estuvo siempre de parte del imputado, el doctor Manuel Salvador Gómez; según declaró Alexey. Asimismo, la juez violó el artículo 372 del Código Penal de Procedimientos Penales, ya que durante el juicio, interrumpió en repetidas ocasiones al momento que la defensa de la víctima cuestionaba a los testigos. Además, en el video de una de las audiencias públicas, se observó que Gabriela Concepción Carrillo, pidió en reiteradas ocasiones a un testigo, no contestar a las preguntas que la defensa de la víctima formulaba o exigía no relatar los hechos y atenerse a sólo contestar brevemente. En una segunda audiencia, la juez pidió a Alexey que se retirara del recinto, dado a que se presentó sin traductor. En este caso, la juez debió suspender la audiencia hasta que se consiguiera un traductor y se garantizaran los derechos de la víctima. Con base a las evidencias asentadas en las carpetas de investigación, eran elementos suficientes para una sentencia condenatoria en contra de Manuel Salvador Gómez, por el homicidio de Elina Kapralova. Esta información fue publicada el 19 de septiembre de 2016, en internet a través de “LucesTV”. El caso que la misma juez, Carrillo Cab, fue quien sentenció a 31 años de prisión a Amos Benoni Martínez Guzmán, por el delito de feminicidio y sin contar con una sola prueba. Además, en los videos de los juicios orales también se aprecia de cómo los testigos caen en contradicciones, incluso en irregularidades, la propia fiscal Guadalupe Reyes Pinzón, quien litigó personalmente el proceso.
