La Fiscalía General de Quintana Roo hoy en día forma parte de la mafia del poder del gobierno y no para la procuración de justicia, ya que es utilizada para encarcelar a los enemigos del gobierno y no a los delincuentes, ante el compromiso y acuerdo que tienen con ellos, además de la corrupción que no se queda atrás. En este gobierno de Carlos Joaquín González, la Fiscalía ha perdido credibilidad en todos los sentidos. En su momento cuando estuvo como titular Miguel Ángel Pech Cen, era solapado por diputados y el propio gobernador, a pesar de todas las irregularidades e injusticias que cometía; sin embargo, todos se deslindaban de culpa porque decían que era autónoma, pero eso sí, cuando se trata de encarcelar a sus enemigos si metían las manos. Hoy la Fiscalía General de Quintana Roo, por primera vez tiene de titular a un fuereño; se trata de Oscar Montes de Oca Rosales, puesto y manipulado por el propio gobernador Carlos Joaquín González, aún cuando se supone que es autónoma. Montes de Oca Rosales, es parte de la mafia del poder del gobierno, pues lejos de desempeñar el papel de fiscal, a su llegada sólo ha servido de vocero, ya que en las raquíticas ocasiones que ha dado la cara después de un evento violento en Cancún o Playa del Carmen, sólo emite la información que horas antes todo mundo sabe de lo que pasó, y cuando se le cuestiona más allá de los hechos, desconoce de todo lo que pasa en la Fiscalía, pese a que es su obligación conocer como titular de la instancia, en pocas palabras, desconoce de todo porque jamás había vivido en Cancún o Quintana Roo; sólo llegó para “calentar la silla” con un sueldo de 120 mil pesos mensuales y libres. El fiscal General, en sus conferencias de prensa bajo las condiciones del área de Comunicación Social, responde incoherencias y falsedades; por ejemplo, el argumentar que hubo un reacomodó del personal de la Fiscalía; sin embargo, la verdad es que las obligó a renunciar bajo amenazas y decir que no cumplían con el perfil. Además, en sus discursos a lado del gobernador, dice que están trabajando en el combate a la delincuencia, cuando bien sabemos que está por encima de ellos y las detenciones es para tranquilizar a la sociedad que reclama la ola de violencia en Quintana Roo.
