Mientras que la Comisión Federal de Electricidad, al menos en el municipio de Benito Juárez, les cobra a las familias el consumo de la energía eléctrica sin perdonar un sólo peso cada dos meses o si es de tarjeta, cada mes, algunos postes de concreto de su propiedad representan un peligro para transeúntes, automovilistas, incluso a las personas que habitan alrededor, ya que prácticamente se están partiendo en dos por el estado deplorable que se encuentran, debido a que tienen muchos años. En el primer cuadro de la ciudad, por ejemplo la avenida Torcasita entre José López Portillo y Miguel Hidalgo, o la Kabah y De La Luna, se aprecian varios postes propiedad de la CFE que resaltan las varillas por lo descascarado, en tanto otros están de lado y lo peor, que tienen cargando transformadores. Hay que recordar, el año pasado azotó en el municipio de Benito Juárez un fuerte aire a consecuencia del mal tiempo por la posible presencia de un huracán. A raíz de ello, se partió en dos un poste, sobre la avenida prolongación Yaxchilán frente a la Cruz Roja, y le cayó a una camioneta estacionada; afortunadamente no hubo lesionados, pero esto se debió al estado deplorable que se encontraba. El riesgo que se corre, aparte de caer el poste en algún vehículo en circulación o transeúnte, si llegara a tener un transformador podría electrocutarlos, o la tragedia sería de mayor magnitud.
