Gracias a que muchos responsables de áreas dentro del Hospital General “Jesús Kumate Rodríguez” en Benito Juárez, llegan a la hora que mejor les plazca o en su caso ni se asoman, esto ha generado que algunos trabajadores abusen de los ciudadanos, pisoteen sus derechos como pacientes y los traten con “la punta del pie”, lo peor, solapados por otros compañeros que ni siquiera madrugan para cumplir con sus obligaciones. La mañana de este miércoles, acudimos a realizar un reportaje sobre este caos que hoy viven los ciudadanos que acuden al Banco de Sangre, del cual fuimos testigos y comprobamos con las personas que había ahí al platicar con ellos. A las cuatro de la mañana empiezan a llegar los donadores de sangre y se forman afuera. En el horario de 07:00 a 07:10 abren la puerta y empiezan a pasar todos; hablamos de más de 30 personas. Al llegar a la puerta del Banco de Sangre todavía tienen que esperar porque las dos personas encargadas están encerradas en un consultorio al fondo de ahí, platicando o contándose de su vida, hasta que por fin se deciden salir para atenderlos. Una vez que entran todos, empiezan sus “sermones” de las dos mujeres: “no pueden hablar, pidan permiso para ir al baño, si salgo y está alguno de ustedes afuera de aquí, ya no entra y se retira, las bancas de afuera son para los pacientes no para los familiares, ellos no se pueden sentar”, entre otras condiciones y que al menos 10 minutos se tardan. En entrevista con dos ciudadanos a quien le omitimos sus identidades por cuestiones de represalias; una de ellas la señora Bertha, quien dijo que lleva más de una semana llegando todos los días con donadores y siempre le ponen un pretexto, pues le están pidiendo sangre porque van a operar a su hija del tobillo; durante el tiempo que ha estado ahí el trato de las dos mujeres siempre ha sido déspota, incluso al principio discutió con la trabajadora social por su comportamiento y la forma de dirigirse a las personas. Don Alberto, otro paciente que se ha desvelado y ha perdido cinco días de trabajo para donar sangre a su paciente quien desde hace dos meses necesita ser operada y no hay fecha, pero ya le pidieron ocho donadores y rechazado cinco. Sin embargo nadie se puede quejar porque la doctora responsable del área de nombre Ariadna Jaqueline Muñoz Cárdenas, nunca está y llega a la hora que quiere.