A poco más de 24 horas que llegaron 600 militares para reforzar la seguridad en el municipio de Benito Juárez y Solidaridad, integrantes de la delincuencia organizada ejecutaron a dos taxistas y a un civil, así como tres más resultaron lesionados, luego de una ráfaga de disparos en el bar “Santino” propiedad presuntamente del líder cetemista y actual regidor, José Isidro Santamaria. El hecho se reportó alrededor de las 5:20 horas de este domingo, por lo que en cuestión de minutos llegaron policías de las diferentes corporaciones y ambulancias al bar “Santino”, ubicado en la avenida Náder y Coba, en la Supermanzana tres.
Frente a este negocio se encontraba estacionado el taxi número 6951 del sindicato Andrés Quintana Roo, y adentro ya sin vida del chofer, quien presentaba impacto de bala en la cabeza, tórax y brazo, mientras que en el interior del establecimiento un civil también fallecido de varios disparos. Dentro de las entrevistas que realizaron con testigos en ese momento los policías ministeriales, obtuvieron que habían cuatro personas más lesionadas y se trasladaron por sus propios medios a un centro médico: dos taxistas y dos civiles, en tanto los agresores huyeron en dos camionetas. Minutos después se logró saber que uno de los operadores con el número de unidad 2859, llegó a la clínica Playamed en el mismo auto para su atención médica, porque presentaba un balazo en el pecho; un taxista más se trasladó a la Cruz Roja y de ahí lo llevaron al Hospital General; y dos más fueron a la clínica del Seguro Social de la Coba donde se reportó el fallecimiento de uno. En el mismo bar “Santino”, se encontró una narcomanta que decía “Venimos por la plaza. CJNG”, así como dentro de las diligencias de la autoridad ministerial, los peritos levantaron 20 casquillos calibre 9 milímetros, y 32 casquillos calibre 7.62 milímetros que utilizan las armas largas AK-47 denominadas Cuerno de Chivo. Cerca del mediodía, peritos en criminalística llegaron frente a la clínica Playamed para realizar las diligencias correspondientes, mientras que policías municipales y ministeriales cerraron la avenida. Ahí se levantó una camisa con manchas de sangre, y se inspeccionó el taxi número 2859 que presentaba un balazo en el parabrisas; posteriormente se aseguró.